Se trata de un animal cuyos pelos se han transformado en púas de franjas marrones y blancas y afiladas para luchar contra sus enemigos. Tienen un hocico largo con dientes muy afilados.
Los erizos occidentales tienen la piel parda y los orientales la tienen blanca.
Llegan a pesar alrededor de dos kilos.
Miden 35 centímetros más 4 o 5 de la cola.
Son mamíferos que tienen hasta 7 crías dos veces al año.
Las crías nacen ciegas y no abren los ojos hasta las dos semanas, a partir de entonces sus púas blancas comienzan a oscurecerse y endurecerse.
Son animales que necesitan una temperatura ligeramente cálida, entre 21 y 29 grados, ya que una temperatura mas baja lo haría entrar en hibernación y moriría y más calor le causaría mucho estrés. Por esto habrá que ajustar la temperatura si vemos que el animal se estira en la jaula como si tuviese calor, si se le ve aletargado o si su temperatura es más fría de lo normal.
A las 6 u 8 semanas de edad las púas del erizo cambian y luego vuelven a cambiar a los 4 meses.
El cambio de púas no es nada preocupante, a no ser que no salgan nuevas o que haya signos de enfermedad o molestias.
Son animales mas bien insectívoros, que se alimentan sobre todo de lombrices, aunque también están abiertos a comer fruta, verdura, carne y huevo.
Gustan de las manzanas verdes y la comida para gatos.
Hay que vigilar mucho la alimentación del erizo, si engorda en exceso puede caerse y darse la vuelta, o salirle pequeños cúmulos de grasa que le impidan andar correctamente.
Se les alimenta normalmente con comida para gatos o comida especial para erizos. Las croquetas que elijamos deben tener un 12% de grasa y alrededor del 30% de proteínas y ser orgánicas, integrales o similares.
Hay que proporcionarle una o dos cucharadas de alimento cada noche.
Aporta también fruta, verdura, pollo hervido (Sin sazonar) o huevos revueltos con la comida, alternando cada cosa para que tenga una dieta equilibrada y variada.
También se le puede dar gusanos de harina o de seda y grillos de 1 a 4 veces a la semana.
La comida habrá que ponerla en un bol lo bastante grande como para que el erizo pueda acceder a el, pero lo bastante pesado como para que no lo pueda volcar.
El agua es mejor dársela en un tubo bebedor y debe ser agua embotellada. Ponerla en estos tubos nos permitirá evitar que la tire y podremos saber cuánto bebe. Usar agua embotellada nos permite darle al animal un agua de mayor calidad.
Los platos y bebederos deben limpiarse diariamente con agua caliente y jabón.
Cosas que no debe comer
Los erizos tienen un estómago muy delicado, por ello no pueden comer frutos secos, semillas, carne cruda, verduras duras sin cocinar, comida que sea pegajosa, grasinenta o dura, uvas o uvas pasas, comida de erizos de la marca Vitacraft, leche, insectos capturados, alcohol, pan, cebolla, cereales, zanahoria cruda, tomates, comida basura, dulces o miel.
Viven en bosques con mucha vegetación, zonas con muchos arbustos o en parques urbanos.
Teniéndolo como mascota debe tener un hábitat similar al bosque, con una jaula fácil de lavar y de buen tamaño de aproximadamente 45 x 60 centímetros como mínimo, que no tenga malla o barrotes para que no se les enganchen las patas ni las púas, que tengan una buena ventilación teniendo un flujo de aire constante, excepto si la habitación cambia de temperatura de manera brusca y que los bebederos sean pesados para que el animal no los de la vuelta. Las casitas deben ser de un solo piso porque los erizos ven muy mal y tienen unos huesos muy frágiles. Además la jaula debe estar bien asegurada para que el animal no pueda escapar y hacerse daño. También debe tener lugar donde esconderse, donde no le dé la luz ni se le pueda ver.
La cama del erizo debe estar echa de virutas de madera de pino o álamo, bolitas de pino o lana.
Necesitará una bandeja higiénica con arena para gatos que no se apelmace. La bandeja debe ser lo bastante grande para el erizo y se limpia diariamante. Al limpiarla debemos aprovechar para controlar las heces y detectar estrés en el animal o enfermedades.
La jaula se debe limpiar como mínimo cada dos semanas.
Al erizo habrá que lavarlo una vez al mes y cortarle las uñas más o menos en el mismo plazo o cuando veamos que son demasiado largas.
Para que el animal se acostumbre al contacto es importante cogerlo a menudo. Para cogerlo haremos movimientos lentos y suaves para no asustarle ni que nos detecte como una amenaza. Si le hablamos debemos hablarle bajito y suavemente. Al menos debemos cogerlo durante 15 minutos al día.
Cuando cogemos al erizo por primera vez en el día debemos dejar que se desperece sobre nuestras manos extendidas y cuando esté del todo despierto podremos alzarlo y tenerlo en las manos.
También es importante no solo cogerlo, sino jugar con él. Son animales que necesitan juegos y estímulos pero que son desconfiados, por ello habrá que jugar con ellos de manera regular para que nos acepten en sus juegos.
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