Todos estos animales en su estado salvaje tienen una dieta variada diferente a la que se le puede dar en nuestro hogar y al alcance de nuestro dinero.
Para recrear el hábitat de estos animalitos se debe suministrar luz UVB (rayos ultravioletas) que son primordiales a la hora de ver crecer a nuestros animalitos fuertes y sanos, también se necesita suministrar vitaminas y calcio para su fortalecimiento.
Para que realicen su digestión es necesario que se le ponga una piedra de calor ya que al ser de sangre fría necesitan del calor en sus pancitas para poder digerir su alimento.
Su terrario debe ser espacioso en lo posible ya que este es el que posibilitara su crecimiento.
Tengo una iguana verde a la que rescaté en un estado deplorable de una maderera (posiblemente salvaje) y tuve un gecko leopardo (eublepharis macularius).
Con estos animalitos comprobé que pueden dar afecto y calor a su manera sin ser calentitos a la hora de sostenerlos, en cambio a ellos les gusta el calor humano y se acurrucaran en ti como lo haría cualquier otra mascota. También suelen lamer como un perrito y hasta responder a su nombre. Está en cada persona cómo ver a estos animalitos pero aseguro que no tienen comparación con ninguna otra especie animal y son interesantísimos. El que decida tenerlos como mascota no se arrepentirá, se hacen querer y mucho... ya sean serpientes o lagartos ya que “las tortugas son ilegales como animales domésticos” ¡Por favor sería bueno que se respete esto y que se tengan animales con papeles criados en cautiverio, no tomarlos de su hábitat ya que esto ayudaría a su extinción! Y son los parientes más cercanos de los gigantescos reptiles que habitaron este suelo hace nada más y nada menos que aproximadamente 230.000.000 de años. Seguiré hablando sobre el tema más adelante
Por: Julián Rovira.
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